Creo que esta publicación puede ser útil para muchas personas que se preguntan cómo es estar enfermo fuera de Polonia. Mi opinión es la siguiente.
1. Una visita al hospital en España (a 3 km de nuestro apartamento de alquiler) con un niño con fiebre comienza mostrando pasaportes y tarjeta sanitaria europea.
2. Después de 15 minutos, el médico de urgencias examina al niño (la mayor parte del tiempo de espera se pasa en el registro, no en la sala de espera). Lo siento. ¡No uno, sino dos médicos (!) examinan al niño! Uno habla español, claramente más experimentado, el otro habla inglés.

3. El médico ordena pruebas: no hay medicamentos ni diagnóstico sin una visita al laboratorio (fue lo mismo en el Caribe, no obtuve ninguna información hasta que llegaron los resultados). Desafortunadamente, en Polonia, a menudo muestras la garganta y recibes antibióticos, incluso si es un virus y los antibióticos no ayudarán.
4. Recibes el resultado, el médico explica la enfermedad, te da recetas para los medicamentos necesarios y te vas.
5. Todo el proceso es gratuito. Sin esperas innecesarias (solo el tiempo que el laboratorio necesita para el resultado) y en un hospital muy agradable.
6. ¡Pero lo mejor viene al final! Pagué 3.60 euros por tres medicamentos en la farmacia. Permíteme repetirlo: ¡3.60 euros! Supongo que fueron reembolsados. Para comparar, mencionaré que el paracetamol líquido para niños me costó 3 euros y 10 céntimos antes, y el enjuague bucal que recibí del dentista para mi otro hijo costó 5.90 euros.
En mi opinión, si te sucede enfermar, considera si realmente debería ser en Polonia. Mis hijos se están recuperando lentamente. ¡El hospital español se llevó un 6!